La alegría es una de las formas en que la vida se celebra y se expresa a sí misma. Hasta cierto punto, se puede considerar a la alegría como un gradiente mayor de la felicidad. La alegría espiritual es un estado de tu Corazón y tu Espíritu. La alegría crea una sensación de satisfacción, aceptación y serenidad, una comprensión profunda de saber que no importa lo que suceda, todo tiene un propósito más alto y va de acuerdo al mayor bien. Este entendimiento produce fuerza y fortaleza espiritual, aun en los  momentos difíciles.

La alegría es también una práctica espiritual. Es el deleite puro y simple de estar vivo. La Alegría es nuestro júbilo en emociones de felicidad, placer, y reconocimiento de abundancia.  También se produce en forma de una profunda satisfacción cuando sabemos que pudimos servir a otras personas en algo útil.

La vida es para disfrutarse, no para soportarse. Por lo tanto si te gustaría abrirte a experimentar más alegría en tu vida aquí hay algunos ejercicios que puedes practicar para cultivar esta experiencia en ti.

  1. Aprecia y agrade tanto como puedas tan seguido como puedas.
    El poder de la gratitud es algo muy grande y poderoso. Puedes ver los beneficios de dar las gracias a través del cambio inmediato de perspectiva, pero los beneficios continúan aún más a largo plazo. Cuando nos hacemos la disciplina de dar las gracias diariamente, aunque salgan retos en la vida, también cultivamos poder y creatividad. A través de esta práctica nos programamos a buscar y encontrar lo positivo todos los días, y en los días difíciles, este hábito se activa y hace el transcenderlos más fácil.
  2. Haz una lista de cosas por las cuales estás agradecido.
    Ya sea en tu celular, en un diario, computadora, o en unas hojas de papel, haz una  lista de las cosas por las cuales estás agradecido, y léela todas las noches. Esto no solo te ayuda a implementar la disciplina mencionada arriba, sino también te apoya a llevar un record para revisar más adelante.

Mantén una memoria visible de la maravilla que se da en tu vida.

Hacer esto te brinda alegría en el momento, pero también te da fuerza para seguir adelante. Al leer tu lista antes de dormir te apoya a sentir apreciación por tu día y te apoya a dormir en energía positiva.

  1. Invita a la alegría a entrar en ti.
    Celebra los cambios y logros en tu vida. Observa momentos de felicidad, por pequeños que sean, y ábrete a sentirlos más.  Baila y brinca de felicidad tan seguido como puedas. Cuando vayas por la calle y veas a una persona sonreír, imitala. Cuando veas a una persona bailar, recuérdate de sentir esa misma alegría que hay en ti.
  2. Trabaja en ti, en tu desarrollo personal.
    Al hablar de experiencias positivas, invariablemente tenemos que hablar de experiencias negativas. Vivimos en un universo polar y para que exista un polo tiene que existir el otro; para que haya alegría tiene que haber dolor, para que haya felicidad, tiene que haber tristeza, para que hay éxtasis tiene que haber agonía. La experiencia de uno intensifica la consciencia del otro. Por lo tanto cuando estés experimentando pesar y tristeza, cuando estés llorando, recuerda que es solo una emoción que pronto pasará y regresaras a la felicidad.

Si deseas salir de lo negativo más rápido, te invito a trabajar en tu desarrollo espiritual. Al hacerte hábil en el manejo de tus emociones negativas, te abres a la felicidad y alegría con mucha más facilidad y eventualmente se vuelven parte de tu experiencia día a día.

Si estás listo para abrirte a más alegría en tu vida y conocer más acerca de tu naturaleza espiritual: la Alegría que YA eres, te invitamos a estudiar nuestro Curso Tu Despertar Espiritual.  Este curso te guía paso a paso a conocer de dónde vienes y cuál es tu propósito en esta vida. El saber esto y vivir de acuerdo a ello te garantiza una vida de alegría y pasión.